El Servicio de Sanidad Vegetal de la Dirección General de Agricultura, Industria Alimentaria y Cooperativismo Agrario de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia ha publicado recientemente una guía sobre las buenas prácticas agrícolas en el cultivo del maíz las cuales pasamos a enumerar a continuación:

  • Todo agricultor tiene la obligación de usar en la siembra de sus parcelas semilla certificada, independientemente de que la finalidad del cultivo sea la alimentación humana o animal. La semilla certificada es aquella que se vende envasada y etiquetada por lo que se prohíbe la venta y el uso de semilla a granel. La utilización de semilla certificada es la solución para aumentar la productividad por hectárea y contribuir a una agricultura innovadora, rentable y sostenible. La inversión en la mejora genética de variedades de cereal ha supuesto numerosos beneficios:
    1. La mejora de la resistencia a plagas y enfermedades
    2. La adaptación de los cultivos a condiciones climatológicas y medioambientales adversas.
    3. Facilitar la mecanización del cultivo y el transporte y almacenamiento del grano.
    4. Mejorar la calidad y la adaptación a los procesos de transformación y uso.
    5. Mejora del incremento de los rendimientos por hectárea.

Como ejemplo, en los últimos 13 años el rendimiento medio ponderado de las 10 variedades de trigo más cultivadas en España se ha incrementado a razón de 26 kg/ha año.

La semilla certificada tiene 3 categorías: G4, R1 y R2; las dos primeras (G4 y R1) son semillas producidas por agricultores que han contratado con las empresas especializadas en la obtención de semillas certificadas la producción de estas para las campañas siguientes. La semilla R2 certificada es aquella que se dedica totalmente a la producción de grano para su consumo, bien en alimentación humana o en alimentación animal, y no de semilla. Esta R2 certificada, ofrece todas las garantías varietales, sanitarias y de calidad.

El proceso de certificación consiste en lo siguiente:

  • Firma de un contrato entre el agricultor interesado y una empresa especializada en la obtención de semilla certificada.
  • Declaración del mismo contrato al organismo oficial de control.
  • Seguimiento de las parcelas a lo largo del ciclo del cultivo.
  • Comunicación, al organismo oficial de control, el inicio de la recolección para realizar las analíticas oportunas. Se entiende por organismo oficial de control la Dirección General de Producciones y Mercados Agrícolas, a través de la Subdirección General del Instituto Nacional de Semillas y Plantas de Vivero, respecto a la ordenación y coordinación en materia de control y certificación de semillas y plantas de vivero y los órganos competentes de las Comunidades Autónomas, respecto a la ejecución de las operaciones necesarias para el control y certificación correspondiente.

Las ventajas de sembrar una semilla R2 certificada son muchas y entre ellas la principal es que cualquier variedad de cereal, a los pocos años de un cultivo reiterado, degenera perdiendo su calidad intrínseca como semilla, lo que se traduce en una disminución del porcentaje de germinación y en una reducción de los rendimientos por hectárea, una mayor posibilidad de sufrir plagas y enfermedades y la aparición de plantas que no se corresponden con el genotipo de la variedad elegida.

La degeneración varietal a la que inexorablemente tienden todas las variedades de cereal, por mucho cuidado que se ponga en su cultivo, es debido a tres causas:

Causas mecánicas: se producen cuando se siembra una variedad en una parcela que tiene semillas no germinadas de una cosecha anterior, semillas extrañas que puede llevar el abono orgánico, o mezclas de semillas no deseadas producidas en la sembradora u otros aperos o almacenes del agricultor.

Causas ambientales: ataques de enfermedades por aparición de nuevas cepas de las ya existentes.

Causas genéticas: ocurre cuando en campos próximos se siembran variedades distintas y se producen cruzamientos espontáneos entre ambas variedades. Esto no solo se produce entre variedades alógamas, como el maíz y el centeno, sino también en variedades autógamas o autofértiles (trigo, avena y en menor proporción la cebada). Estos cruzamientos espontáneos producen, en generaciones sucesivas, modificaciones en las características varietales y en las características agronómicas deseadas.

  • Las semillas certificadas deben de ser adquiridas a un operador que esté inscrito en el Registro de Operadores Profesionales de Vegetales (ROPVEG).
Pasaporte fitosanitario del maíz

Pasaporte fitosanitario del maíz

  • En el caso de tratarse de variedades transgénicas (maíz Bt), el etiquetado debe llevar una indicación expresa de que se trata de una variedad modificada genéticamente y también tiene que hacer mención al identificador correspondiente del evento transgénico provocado, MON-∅∅81∅-6.

En el caso específico de maíz transgénico el agricultor debe cumplir con las siguientes especificaciones:

  • Con el fin de prevenir la resistencia que inducen estas variedades al ataque de determinadas orugas (Ostrinia nubilalis y Sesamia nonagrioides), si se siembran más de 5 hectáreas de maíz Bt, se debe sembrar una parcela, denominada parcela “refugio”, con maíz convencional y cuyo tamaño debe ser de un 20% del total del maíz sembrado en la finca.
  • El cultivo de maíz Bt es perfectamente compatible con otros sistemas de producción, ya sea de maíz convencional o ecológico. Si hubiera parcelas colindantes de maíz Bt a menos de 20 m de otras parcelas que vayan a ser destinadas a maíz convencional o ecológico y además la diferencia de la siembra es menor a 4 semanas, se debe de sembrar una banda de 12 líneas de maíz convencional entre el maíz Bt y el convencional o ecológico, sirviendo dicha banda sirve como parcela “refugio”.
  • Es obligatorio conservar durante 5 años la documentación de las transacciones realizadas por el agricultor con material vegetal que contenga organismos modificados genéticamente (OMG), tanto la compra de semilla como la venta de grano.
  • Así mismo, es obligatorio, al realizar la Solicitud Única de ayudas de a la PAC, el incluir en la declaración las variedades de maíz Bt.

Una mazorca de maíz