La utilización de recipientes en el cultivo de plantas, contenedores y macetas, nos permite plantar todo tipo de especies sin preocuparnos de si la tierra de nuestro entorno tiene un determinado pH, CE, contenido en materia orgánica, etc., y a los que no tienen la posibilidad de acceder a un terreno les permite el poder desarrollar con normalidad cualquier ciclo de cultivo de cualquier planta, como en un huerto urbano. Así mismo nos permite ubicar las plantas a nuestro gusto, combinando especies, colores, tamaños, y permitiéndonos variar la planificación de un jardín en minutos.

La elección de uno u otro recipiente dependerá de nuestros gustos, pero no debemos olvidar que deben cumplir ciertos requisitos:

  1. Tienen que tener la capacidad suficiente para contener el sustrato necesario para nuestras plantas.
  2. Deben disponer de un sistema de drenaje que nos permita eliminar fácilmente el agua sobrante de los riegos.
  3. Deben tener estabilidad. Si se vuelca o rompe con facilidad puede casar daños a las plantas.

Os paso a describir los distintos tipos de materiales para contenedores y macetas, al igual que su descripción, que podemos utilizar como contenedores de nuestras plantas.

Contenedores y Macetas: tipos y materiales

A. El Barro o terracota.

Se denomina así a la arcilla modelada y endurecida por cocción en horno. El barro es un material poroso por lo que la evaporación del agua es mucho mayor que con otros materiales. Esto supone una ventaja con plantas que requieren una raíz fresca en verano y/o requieran riegos con mucha frecuencia ya que el agua al evaporarse necesita calor y este lo saca del sustrato, refrigerándolo y evitando que se recaliente, con el consiguiente peligro para la raíz. Por otro lado, una mayor evaporación de agua nos evitará encharcamientos radiculares y nos permite usar sustratos que retengan más el agua; si usamos sustratos menos retentivos deberemos estar atentos para evitar una desecación excesiva. Al ser un material denso, dan cierto peso extra al conjunto con lo que ganamos en estabilidad y evitamos vuelcos, pero nos costará más moverlos de un lado a otro.Son frágiles y se pueden romper o desconchar con facilidad; para evitar esto una vez comprada la sumergiremos 24 horas en agua fría y la dejaremos secar al aire libre, para así lograr fortalecer el material y que la maceta nos dure más tiempo. Estas macetas tienden a decolorarse con el tiempo y a que le salgan manchas blancas; esto se soluciona dándoles aceite de linaza. Muchas veces nos preguntamos por qué duran más las macetas antiguas que las que estamos comprando últimamente. Esto se debe a que la arcilla que se utiliza actualmente está más filtrada que la que se usaba antes, lo que provoca que sea menos resistente a las variaciones de temperatura y tenga una mayor capacidad para absorber agua, que cuando se congela, estalla.

Contenedores y macetas
Contenedores y macetas

B. La Cerámica esmaltada.

No es más que la fusión de la arcilla con cristal en polvo. Aparte de lo estético, se diferencia de la terracota clásica en que es menos porosa.

C. El Plástico.

Están fabricados en PVC, resinas sintéticas o de una mezcla de polietileno y polipropileno y no se rompen por efecto de las bajas temperaturas. Se fabrican en casi cualquier color y su diseño puede ser liso, con textura o con relieve, así como brillantes o mate. Este material suele usarse para simular a otros materiales por lo que a veces podemos llegar a pensar que es un material de segunda categoría, pero no es así; es un material ligero por lo que podemos usarlo en ubicaciones colgantes, de balcones y repisas, donde un material más pesado no tiene cabida. No es un material poroso por lo que el agua no se pierde por evaporación lateral lo que nos ayuda a disminuir la frecuencia de los riegos en plantas con grandes necesidades hídricas. Por otro lado, nos permite usar sustratos menos retentivos.

Otra variante son las bolsas de cultivo fabricadas con láminas flexibles y rellenas de sustrato. No son nada estéticas, pero cumplen su función, sobre todo en el cultivo de hortícolas.

Macetas de plástico
Macetas de plástico
Contenedores
Contenedores

D. La madera.

Es un material que está volviendo con fuerza debido a las tendencias vintage. Aquí debemos distinguir entre madera dura y madera blanda: la madera dura es aquella que proviene de un árbol perteneciente a la familia de las angiospermas (plantas provistas de flores que producen semillas encerradas en un fruto). La madera blanda es aquella que proviene de un árbol perteneciente a la familia de las gimnospermas (plantas con semillas cuyos óvulos y semillas no se forman en cavidades cerradas). La diferencia entre una y otra radica en que los árboles pertenecientes a las angiospermas tienen un crecimiento mucho más lento por lo que su madera es más densa y más duradera ya que necesita más tiempo para crecer y alcanzar un volumen determinado, pero también más cara. Entre estos árboles encontramos al arce, la madera de balsa, el roble y el olmo.

La mayor parte de la madera blanda proviene de la familia de las coníferas, tales como pinos, cipreses, abetos, cedros, tejos y alerces. La madera blanda es muy común, (de hecho, es el 80% de la madera que usamos), pero es de menor calidad, ya que tiene menos vida útil, no dura tanto tiempo como la dura, requiere más cuidados y se daña con facilidad.

Para prolongar la vida útil de la madera tenemos varias opciones:

  • Aplicaremos un producto de protección antes de usar, pero nos aseguraremos que tenga ningún tipo de toxicidad para nuestras plantas.
  • Podemos forrarlas con plástico en el interior.
  • También podemos usarlos para introducir en ellos otro tipo de maceta (plástico, barro, etc.) y evitar que el sustrato esté directamente en contacto con la madera.
Contenedor de madera
Contenedor de madera 1
Contenedor de madera
Contenedor de madera 2

E. La piedra.

Pueden estar fabricados en piedra natural o reconstruida. En piedra natural el material más usado es el granito debido a que resulta resistente a la compresión, flexión, impacto y por supuesto al desgaste, lo que le convierte por méritos propios en una de las mejores opciones si lo que buscamos es una jardinera de exterior y robusta. Es un material muy decorativo pero muy pesado.

La piedra natural es igual de decorativa pero menos pesada y menos costosa. Actualmente los estándares de calidad son mucho más altos y los procesos de fabricación y materiales empleados en este tipo de jardineras no tienen nada que envidiar a sus homólogas de piedra natural.

Tanto la piedra natural como la artificial son materiales poco porosos.